¿SON LO MISMO LAS CONSTELACIONES Y LOS SIGNOS DEL ZODIACO?

Con este artículo doy respuesta a la pregunta que ha hecho al blog Yaiza, una respuesta que es a la vez apasionante y compleja!

Aun cuando ya hablamos de este tema en un artículo anterior, creo que puede ser interesante volver a formular la respuesta. Si queréis leer de nuevo el artículo anterior, haced clic aquí.

En la antigüedad el hombre se dio cuenta que por la noche aparecían dos tipos diferentes de estrellas, unas que se mantenían fijas respeto a ellas mismas (lo que ahora conocemos como estrellas) y unas que se movían (lo que ahora conocemos como planetas).

Las estrellas fijas las agruparon dibujando líneas imaginarias entre ellas y crearon formas denominadas constelaciones. Las constelaciones normalmente representaban figuras de personajes míticos o de animales. Las constelaciones actuales provienen de las constelaciones griegas y tienen su nombre oficial en latino. Según la Unión Astronómica Internacional son 88. Entre ellas podemos encontrar por ejemplo: Ursa mayor y Ursa minor que corresponden a la Osa Mayor y a la Osa Menor o también Gemini o Leo que corresponden con las constelaciones de Géminis y Leo. En el dibujo de arriba podéis observar a la Osa Mayor.

El segundo grupo de estrellas es el de las que se movían entre los fijas. Lo hacían a diferentes velocidades, cambiando a menudo de sentido, pero siempre siguiendo una misma dirección. Estas estrellas recibieron el nombre de planetas, que proviene del término griego “cuerpo errante”. Pues bien, resulta que al observar los planetas vieron que se movían siempre por la misma franja del cielo. Esta franja coincidía con la Eclíptica, que es el camino aparente que, visto desde la Tierra, sigue el Sol en su recorrido diario. La podemos imaginar porque de día es por dónde circula el Sol y por la noche, la Luna y los Planetas. Durante las diferentes estaciones del año esta franja va más alta o más baja respecto el horizonte y esto se debe a que la posición de la Tierra respecto el Sol cambia durante el año. En el dibujo la podéis reconocer como la línea circular que delimita la zona amarilla.

También se dieron cuenta que esta franja de cielo, por dónde circulaban el Sol, la Luna y los planetas, pisaba una serie de constelaciones y siempre las mismas. Estas constelaciones se denominaron las constelaciones de la eclíptica y son las que conocemos como: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis. Y fueron estas constelaciones las que precisamente dieron nombre a los 12 signos del Zodiaco. En el dibujo podéis ver dibujadas estas 12 constelaciones de la eclíptica.

Pero ¿qué diferencia hay entre las constelaciones y los signos del Zodiaco si su nombre es el mismo?
Pues diversas. La primera y más importante es que aun cuando los nombres coinciden y ambas se encuentran en la misma franja de cielo, representan cosas bien diferentes. Las constelaciones son dibujos de conjuntos de estrellas, en cambio los signos del Zodiaco representan símbolos, tienen significados específicos y la Astrologia los creó expresamente para ayudar a interpretar los designios del Cielo en la Tierra.

La segunda diferencia entre constelaciones y signos es que aun cuando ambas tienen 12 porciones y tardan un año en recorrer su ciclo, hay constelaciones más largas y otras más cortas y por lo tanto ocupan más o menos espacio en la franja de la eclíptica, mientras que los signos del Zodiaco ocupan todos el mismo espacio, 30 grados que se corresponden con 30 días o un mes aproximadamente. En el dibujo podéis observar la división exacta de los signos.

Así la franja de los signos Zodiaco está dividida en 12 porciones de 30 grados cada una y a cada porción le corresponde un signo del Zodiaco. Esta franja da una vuelta entera cada año, así a cada 30 días le corresponde una porción diferente de esta franja. Por eso es por lo que decimos que los nacidos entre el 21 de marzo y el 21 de abril (en total 30 días) serán del signo de Aries, ya que el Sol durante estos 30 días viajará por el signo de Aries pero no por la constelación de Aries.

Y la tercera diferencia hace referencia al final del último párrafo. Y es que allí dónde hay actualmente la constelación de Aries no encontramos el signo de Aries sino el signo de Piscis. ¿Por qué? La causa es el movimiento de precesión de los equinoccios, según el cual el primer grado del Zodiaco no es fijo y se va moviendo muy lentamente hacia atrás en un ciclo de 26.000 años. Es decir cada 26.000 años el primer grado del Zodiaco se encuentra en el grado 0 de Aries pero durante estos 26.000 años se va moviendo por todos los grados de la eclíptica. Cuando la Astrologia estableció por primera vez este primer grado del Zodiaco, también denominado Punto Vernal, hace unos pocos miles de años, este se encontraba en 0 de Aries pero desde entonces se ha ido moviendo y actualmente ya no coincide. Ese es el motivo por el cual las constelaciones y los signos no coinciden en el cielo y no lo volverán a hacer hasta que hayan pasado estos 26.000 años. Esto provoca este desfase entre constelaciones y signos.
Pero ¿como resuelve la Astrologia esta contradicción de no coincidencia entre signos y constelaciones?

Teniendo en cuenta que la Astrologia es un lenguaje simbólico es más fácil hacer frente a estas diferencias sin que se produzcan contradicciones. Los astrólogos lo han resuelto estableciendo dos sistemas diferentes de Zodiaco, el Tropical y el Sideral.

La mayoría de astrólogos trabajamos con el Zodiaco Tropical, en el cual el signo de Aries siempre empieza el día que empieza la primavera y por lo tanto damos importancia al ciclo estacional, puesto que consideramos que simbólicamente estamos más vinculados con nuestra relación con el Sol, nuestra estrella, nuestro sistema solar y sus planetas y con el ciclo de la natura y su desarrollo.

Pero también hay astrólogos que en lugar de trabajar con los signos, trabajan con las constelaciones y entonces utilizan el Zodiaco Sideral, basado más en las estrellas que en nuestro Sistema Solar. Estos astrólogos también tienen su lenguaje astrológico particular.

Aun cuando es un tema astronómicamente complejo, espero haber resuelto alguna de vuestras dudas. Hasta la próxima y lo mejor para el 2010!